El puerco sabe, y yo sé que él sabe, pero nos hacemos mensos los dos. No tengo claro si me guarda rencor por lo del café, o es precisamente porque ya no le doy que me detesta. El caso es que la guerra ha comenzado.
Jugábamos inocentemente en el garage, y traté de hacer que el puerco se tirara encima una pesada caja de herramientas sin que se diera cuenta. Pero me salió el tiro por la culata. Aunque el miserable fingía no darse cuenta de nada, terminó haciendo que la caja cayera sobre mí.
Debido a mis reflejos gatunos pude eludir la peor parte, pero de todos modos una llave cayó sobre una de mis patitas. Miré al cerdo con odio, empecé a llorar con toda la desgarradora ternura de que soy capaz. Me duele reconocer esto, es patético haber hecho algo así, fingir el llanto siempre es deleznable, es bajo hasta para mí... pero era necesario.
Alice vino corriendo, me vio tirado como mártir, con las herramientas encima, y el puerco culpable al lado. Nos miró con gesto extraño, creo que intuye que hay algo raro en todo esto. Finalmente su consabida solidaridad para con los animales la movió a llevarme al veterinario.
Ellos no me agradan, siempre te dejan doliendo algo, y como yo no me dejo manipular por esos carniceros, me drogan para que no pueda defenderme. Cuando abrí los ojos tenía la pata vendada, tan apretada que me molestaba. Alice me regañó cuando traté de quitármela, y aunque lo he intentado insistentemente no he podido terminar de safar mi pata. La anestesia me puso el olfato muy sensible, perdí el apetito (cualquiera que me conozca sabe que eso es preocupante) y hasta náuseas me dieron.
Pero me las va a pagar ese malvado puerco, no saldrá ileso la próxima vez...
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Hola, pasando de nuevo por aquí, por cierto, en cuanto a que comentario me merece la pelicula de Dragon Ball Evolution...pues, aún no la he visto. Creo que esperaré a que salga en DVD para rentarla. Prefiero esperar Wolverine Origins y Star Trek. je je je, Esas si valdrán la pena.
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